Mahou Tsukai Precure! - Anime - CureUp! Rapapapapaaaa, I’m not loving it

Reseña por L.A. y ONPUELENA

Esta reseña contiene spoilers.

Wait, is this real? ¿Una review de Mahou Tsukai Pretty Cure casi un año después de terminar la emisión? Permitidme ilustraros el motivo de tal milagroso acontecimiento:

No iba a haberla pero Onpu estaba ociosa y dijo “venga, va”. Y fue.

¿Queréis más detalles?

Estábamos hasta arriba de curro de la que acabó (yo tuve que ir al hospital y todo por ello, no exagero) y Mahou Tsukai fue trash que quería olvidar de una vez, así que quedó de lado completamente. Pero ahora Onpu no estaba tan liada y como ya es tradición que hablemos de PreCure aquí, pues me preguntó si yo estaba liado y si quería hacer la review de Mahou a estas alturas. “Tengo curro, odio Mahou Tsukai y no quiero gastar mi tiempo en ella cuando ya ni la recuerdo”, pensé. O mejor dicho, debería haber pensado, porque le dije que sí y con ganas.

Qué le voy a hacer, soy tonto y me encanta escupir veneno.

Al tema. Muy probablemente no lo recordéis ya, pero en la reseña de GoPri ya me quejé de que Mahou Tsukai estaba siendo mala de narices, y aunque hubo un tanto de polémica porque varias personas la consideran fuertemente como una de las mejores temporadas de todas (y algo que admiro y respeto es que dieron argumentos medianamente válidos para ello… Los cuales no comparto en absoluto), desde luego no mejoró en lo más mínimo desde aquel momento hasta el final. Bueno, quizás un poquitito, el segundo ending molaba lo suyo y por fin hubo algo de plot, aunque se movía demasiado lento.

El mayor fallo de todos es la temática. “Magia” sonaba prometedor para mucha gente, con la esperanza de ver un lore como el de Harry Potter; pero yo tenía claro por dónde iban a ir los tiros y desgraciadamente acerté: bullshit injustificado. Con la excusa de la magia podían hacer lo que les saliera de la peineta sin justificación o coherencia alguna, y fue aún más descarado cuando ni siquiera les dio por intentar aprender hechizos. Sólo con imaginarlo bien y empezar con “Cure Up! Rapapa”, decías lo que querías y bum, ya estaba. No había límites, no había control, no había esfuerzo. Eso orientaba cualquier trama de episodio a ser un chiste, porque usaban la magia para echar unas risas y no había ningún propósito, todo se podía arreglar pidiendo lo adecuado con la magia pero simplemente no lo hacían por idiotas.

Esta falta de conflicto real que enfrentar lleva, por supuesto, a que no se puedan desarrollar los personajes; lo cual es una pena porque esta temporada sólo tuvo tres Cure (con la mitad de la serie centrada en dos): esto no pasa desde Splash Star, una oportunidad maravillosa para desarrollar a las chicas. Tirada a la basura para acabar con una bobona malcriada, una tsundere medianamente inteligente y una alien descontrolada.

Trama:

La trama se nos va un poco de lo usual en este caso, y es que como antes mencioné no había conflicto. No sólo por lo fácil de la magia, sino porque el enfrentamiento de los villanos distaba de estar entre las prioridades de la serie: en una declaración un poco exagerada admito, diría que estaban casi por estar. Sin embargo, sí que quisieron innovar un poco en ese aspecto, algo que sí me agradó bastante.

La idea es la siguiente: una brujita necia de unos 13-14 años decide demostrar a ella y al mundo que es más de lo que se siente que es y parte a buscar una piedra mágica que se encuentra en el Mundo No Mágico (ya para empezar, ni los muggles ni su mundo tienen nombres propios, todo el día oiréis “no mágicos” o “mágicos” para distinguir) que están buscando a la vez varios hechiceros peligrosos y que nadie de las altas esferas mágicas sabe dónde se encuentra. Tan necia es la niña que ni siquiera se cubre para que no la vean, con lo que el karma la recompensa siendo identificada por otra niña de su edad con mentalidad de 7 (hasta va por ahí con su osito de peluche) que no la deja en paz. Y resulta que ambas tienen otra piedra mágica, el Linkle Diamond, que les permite transformarse en Pretty Cure (Brujas Legendarias, aquí) y enfrentarse al Hechicero Oscuro cuando les ataca pensando que tenían la piedra que buscaban todos, la Linkle Emerald. 

Uno esperaría que la trama se centrase en el conflicto de las chicas contra los Hechiceros Oscuros (no creo tuvieran nombre de colectivo ahora mismo) en a ver quién atrapaba la Emerald primero, pero honestamente, eso era para cumplir los mínimos de la historia que requiere PreCure (ya sabéis, para que se transformen y haya accesorios varios que vender en tiendas), y la trama se centra sobre todo en ver a la protagonista (la chica de 7 años mentales), Mirai, pasarlo teta en el mundo mágico y humillar a su compañera la maga, Liko, mostrándole que hasta ella podía hacer magia mejor que ella. Básicamente, hacer el monguer con amigos y meter bullshit mágico por todas partes. Sudaban de explicar cualquier cosa, por ejemplo Mirai desapareció una semana de su casa por ir a la escuela de magia al empezar la serie, y su familia se contentó con una aparente llamada tras las cámaras en la que SÓLO participaron la abuela y la niña. En la que tan ricamente Mirai dijo: ”abuela estoy en una escuela de magia una semana, ¡bye!”; y la abuela entendió que era una escuela de modales (juego de palabras japonés o algo así) y que vale. Podría haber sido secuestrada y colaba igual.

La historia se desarrollaba casi exclusivamente cuando iba conviniendo meter plot (mitad y final de temporada), y la verdad, era en concepto una muy buena historia, pero estuvo falta de amor. El líder de los Hechiceros Oscuros, Dokurokuxy, era un viejo amigo del director del colegio que quería indagar en las artes oscuras para preparase ante ella, pero se le fue la mano; y finalmente tras una pelea final vs Dokurokuxinger Z equitativamente mala al resto de la serie, resulta que Dokurokuxy era un peón accidentalmente inmiscuido y el verdadero problema venía de un mal mayor, mayor. Que esto es clásico en los shonen, pero en PreCure el grupo de villanos siempre fue único en la temporada, con lo que tener otros villanos completamente no relacionados posteriormente en la misma temporada es algo nuevo en la saga. La pena es que esto llevó a un total superior a 10 enemigos durante la serie, y claro, el desarrollo de cada uno fue nulo. 

Posteriormente intentaron meter más trama con este nuevo mal, hablando de cómo los Mundos Mágico y No Mágico eran uno solo, pero no le dieron el suficiente interés e insistieron en mantener a las niñas haciendo el idiota con la magia como foco principal. Ah, bueno, ahora con un añadido extra: la tercera Cure, un hada llamada Haa-chan convertida en adolescente de golpe y que ve a las otras dos Cure como sus madres. Un concepto brillante, que me hicieron ver en discusiones sobre lo mala que era Mahou Tsukai y tengo que admitir que es buena idea, pero su ejecución fue… En fin, mejorable. El mayor problema de la tercera Cure es que tenía un overpower de la leche, y si las otras ya hacían lo que les daba la gana, imaginad ésta que no sabía nada del sentido común (evidentemente, con la educación que recibió de sus “madres”) y tenía el poder de violar la Física por todas direcciones creando materia de la nada. Esto, claro, además de llevar a los hipócritas episodios en los que Liko y Mirai intentaban educar a Haa-chan en no hacer cosas que ellas fijo hubieran hecho antes dada la oportunidad, provocaba que Mirai y Liko fueran total y absolutamente innecesarias en las peleas ya que Haa-chan podía contra todo. Heck, si al final fue ella quien salvaba el(los) mundo(s). Literalmente, el papel de Liko y Mirai como Cure era criar a Haa-chan para que ella se encargara de todo. Un concepto interesante… Pero, habéis adivinado, mal llevado a cabo.

No sé si tengo algo más que comentar de la trama, creo. De la que buscaban la Emerald se encontraban una Linkle Stone diferente por episodio, o mejor dicho, aparecía en sus caras because yes. Su importancia era nula, salvo las cuatro principales que les daban diferentes trajes no se molestaron en usarlas hasta las peleas con Dokurokuxy, Labut y poco más. Ah, el power up lo consiguieron sin motivación ni conflicto alguno en un sueño sobre Cenicienta, que para mí fue el mejor episodio de Cenicienta de PreCure, pero no es un cumplido considerando lo trillado que está ese cuento en la saga.

Personajes:

Creo que algo que tendría que hacer notar de los personajes es que tenían buenos diseños. Había muchas sutilidades y conceptos que me agradaron mucho. Por ejemplo, en el Mundo No Mágico todos tenían pelos normales, como se verían en la vida real (no recuerdo a nadie de pelo raro al menos), con los colores raros como azul o rosa limitándose al Mundo Mágico; o que los secuaces de Deusmast tenían diseños basados en espíritus malvados de todo el mundo, como djinns (genios) o diablos. En algunos casos veías hasta inspiraciones algo “ghiblescas”, aunque quizás sean cosas mías. Desgraciadamente, ninguno de ellos puede decirse que tuviera un desarrollo digno. Mencionaré algunos:

- Mirai Asahina/Cure Miracle: la supuesta protagonista, y digo supuesta porque es probablemente la que menos plano ha chupado en toda la saga. Además de poco importante para una main, su desarrollo es prácticamente nulo. Aunque no la han puesto de idiota en términos escolares, tenía una mentalidad demasiado infantil, centrándose sólo en pasarlo bien sin pensar en las consecuencias y cuya única motivación era “no separarse de Haa-chan y Liko”, repitiéndolo una y otra vez. La verdad, escupiría más veneno sobre ella, pero tuvo tan poca presencia como prota que no recuerdo mucho.

- Liko Izayoi/Cure Magical: tsundere supuestamente inteligente pero torpe y necia cuyos miembros familiares gozan de moderada fama, así que se siente algo acomplejada. Parece tener más dedos de frente que el resto, pero a menudo se le ve cometer los mismos fallos garrafales, como volar por ahí libremente, y sudar de las consecuencias. Pobre equivalente de la “Cure inteligente” que suele haber en cada temporada. Su apellido es falso, en el Mundo Mágico no gastan de eso, pero los muggles exigen uno así que…

- Kotoha Hanami/Haa-chan/Cure Felice: una hadita adorable a rabiar que sale de un libro mágico con cierta electrónica (lo llaman Sumahon, Smartome en inglés, me hizo mucha gracia el concepto) y que fue mi única motivación de ver la serie durante la primera parte. Al contrario que otras hadas bebé, que se supone iban creciendo con la serie pero apenas se notaba (lógicamente por otra parte, ya que los eventos de cada temporada duran un año), con Haa-chan cumplieron mejor la idea de que fuera creciendo, si bien quizás un poco rápido al final porque para el capítulo 22 tenía que ser la nueva Cure. Aunque reconocible aún, perdió muchísimo como adulta en mi opinión, porque nadie considera adorable a un bebé de 14 años. Con la triste educación de sus madres adoptivas, Haa-chan (ahora Hanami en la Tierra) no tenía dos dedos de frente y hacía lo que le sale de los ovarios independientemente de que tenga sentido, bailando en la línea de lo gracioso y frustrante para los televidentes. Como Felice, su personalidad cambiaba (luego resultó que era porque era la reencarnación de la diosa de la temporada, Madre Rapapa, nada trillado, no) a algo más seria… Pero jodidamente overpowered, hasta el punto de que las otras dos no eran necesarias para nada por mucho que nos lo intentaran hacer ver. Oh, y su vestido parecía una bolsa de basura.

YYYYYY JUNTO A NUESTROS DIGIMOOOON wait, tú no eres Mimi

- Mofurun: oso de peluche que Mirai llevaba siempre en una cestita a todas partes (¿?), que cobró vida cuando Mirai y Liko se encontraron y nadie jamás sabrá cómo ni por qué. Que recuerde ahora mismo no tengo nada en contra de ella, la verdad, aunque poco original para un hada tenía buen diseño y no resultaba muy cargante. Le gustan las galletas y fue Cenicienta en vez de las otras chicas. En la peli se vuelve Cure e inmediatamente supera a todas las demás de la serie por paliza (y qué paliza <3).

- Kouchou: tío bueno inútil de la temporada. Es un vejete que gasta su magia en parecer joven, come clementinas congeladas en bloques de hielo a pelo y nunca jamás proporcionó información útil a tiempo. Si es que llegó a proporcionar alguna. De hecho, hasta se pasa sus propias normas por el forro. Sencillamente le odio.

- Cathy: es un relleno del montón, honestamente, si le doy una mención por separado es porque la considero el mejor personaje de todo el bando de los buenos… Y es triste porque es una bola de cristal que tampoco ayudó mucho, pero tuvo sus (escasos) puntazos.

Pese a que se lo merece la que más no hay ningún artwork digno de la pobre, pero acabo de descubrir que existe en versión juguete y LA NECESITO

- Tres Grandes Glorias: no es el nombre oficial ni nada, es un mote que les puse yo. Son las tres peores estudiantes del colegio mágico (con Liko, ‘cause da igual que tengas dieces en teoría si no eres capaz de hacer magia). Lo mejor de todo es que no son idiotas (I mean, todo el cast de los buenos lo son, digo en sentido escolar): Emily era una cobardica que le asustaba todo, Kay se olvidaba de traer el material, y Jun sencillamente pasaba porque le interesaban más los muggles y sus cosas. A mitad de temporada en adelante lo demuestran y es algo que me agradó, la verdad, pero mi desprecio por el plantel en esta temporada no se vio mermado. Básicamente las sidekicks de las chicas en el Mundo Mágico.

- Las Conscientes: otro mote personal. Es impresionante, tanta magia que tiraron por ahí sin cortarse un pelo en el Mundo No Mágico, y sólo uno de sus habitantes se pispaba seriamente de ello. Al inicio de la temporada, la verdad es que me sacaba una sonrisa ver a esa compañera de Mirai flipar en colores con lo que hacían las protas por ahí, pero cuando simplemente ya no se cortan un pelo con ello pierde la gracia. En fin, a esa chica se le une otra que no había visto nada pero creo le gustaba la primera y le creía, aunque luego también tiene un par de avistamientos. Sidekicks de las chicas en el Mundo No Mágico, quizás con otro amigo de Mirai que le gustaba Hanami, pero tienen mucha menos presencia que las Tres Grandes Glorias. De hecho no sé ni por qué las menciono aquí, ni recuerdo sus nombres. Hasta me acabo de inventar el mote, nunca las llamé así. 

- Dokurokuxy: malo del primer arco, durante una buena parte todos pensamos que era una mujer por un error de traducción hasta que habló con voz profunda de maromo. Un esqueleto con toga que tenía acceso a magia oscura muy poderosa, pero le drenaba enormemente así que quería la Emerald para ser todopoderoso y dominar el mundo. Luego se revela que se llamaba Kushi (por lo que Dokurokuxy era algo como Kushi envenenao o así), que era amigo del dire en el pasado y vuelve como fantasma para el shipping. El caso, como villano muere vencido en una forma sorprendentemente similar a Mazinger Z que me hizo cuestionar más si cabe su supuesta magia. Prometía pero como todos los villanos de esta serie, meh. 

- Yamoh: Lagarto Juancho versión peregrino colonial. En términos de diseño era el más flojo de los villanos e incluso él se reconocía como demasiado débil cuando era simplemente la mano derecha de Dokurokuxy, pero se alzó en la temporada como uno de los mejores villanos “de verano” tras ser el único superviviente del grupo de villanos y volverse tarumba rindiendo culto a un espantapájaros de su amo. En el último capítulo dicho monigote cobra vida por una caries mágica de su antiguo amo y él resucita sin saber nadie cómo, pero es feliz y es lo que importa. Creo.

- Hechiceros Oscuros: con diseños muy propios de Yes!, prometían enormemente, pero la verdad se quedaron muy cortos. Animales convertidos en siervos mágicos humanoides, competían entre ellos por conseguir el favor de Dokurokuxy, pero nunca se vio lo suficiente de ello. Batty fue el único con algo de desarrollo, aunque apresurado, mientras que los otros dos no tuvieron ninguno. Cosa curiosa, es algo que me encantó al final de la serie… Porque incluso tras perder su forma de secuaz, seguían completamente a lo suyo: Sparda como una arañita inocente intentando conseguir los libros mágicos y Gametts como una tortuga de jardín buscando camorra contra tiburones. Buenos seiyuus esos dos, por cierto.

He’s beauty, he’s grace

- (Don)Yokubaru: ¿sabéis de eso que los fans de PreCure se crean sus propias series y luego canonizan uno de los nombres de sus Cure en la serie real cabreándose de lo lindo? A mí me pasó con los monstruos de la temporada, los míos se llaman Yokuban y apenas se nota la diferencia hablando. Anyways, no hay mucho más que decir de ellos. Son fusiones de dos objetos, lo cual es una buena idea, pero su ejecución SIEMPRE era penosa, en la gran mayoría de las veces sin esfuerzo alguno en el diseño. Los Donyokubaru eran las versiones invocadas por los malos de la segunda parte, y aunque mejoraban con el cambio de una calavera con mechones a una especie de monstruo de pintura interdimensional, la mecánica que seguían era la misma. Como breves adiciones tenemos los SuperYokubaru que usaba Yamoh durante el verano (Yokubaru con diseño más chungo pero igualmente penosos) y un par de fusiones de Yokubaru con los Hechiceros Oscuros.

¿Y te preocupan los Abejonejos?

- Deusmast: villano final de la serie, una entidad un tanto… Abstracta. Una especie de encarnación del mal, la muerte, el final y el caos; contraparte de Rapapa. No voy a mentir, creo que su concepto general es brillante y podría haberle puesto en lo más alto del ranking de jefes finales de la saga… Si no hubiera tenido taaaaaaaan poco amor. Ni siquiera le contrataron seiyuu, hablaba usando a sus secuaces como marionetas. Fue sellado en el Sol por Rapapa y llegó a la Tierra en los últimos episodios, en los que apenas se le veía siquiera haciendo nada más que esperar a que el mundo se fuera al carajo él solito. Literalmente existía para ser algo a lo que enfrentarse al final de la serie, y ya. 

- Neverending Chaos: los generales de Deusmast, son 12 pero las chicas sólo se enfrentan a 4. Sellados en objetos antiguos y liberados poco a poco por la magia oscura que dejó Dokurokuxy (luego revelada ser “muhou”, juego de palabras entre “mu” y “mahou”, Magia de la Nada), los 8 restantes fueron liberados al final del todo e integrados directamente a Deusmast, así que nunca se les vio. En general los considero muy interesantes, tanto en todo su backstory pobremente revelada como por sus diseños, basados en seres mitológicos semidivinos. Tenían buenos seiyuus y se les suponía como semidioses, pero ninguno que se diga dio un combate directo que fuese destacable (el de Labut, pese a su notorio overpower, fue directamente ridículo de lo mal ejecutado que estuvo). Tengo que destacar a Orba por ser el único villano serio.

Se merece los dakimakuras que han sacado de él.

También destaco a Labut que fue mi personaje favorito de la serie, no me agradó mucho su peinado pero me cayó muy en gracia. Benigyo gigante también tuvo su punto, pero era muy plana...

...Como personaje, porque físicamente, OH BOI.

- Otros: salvo la subdirectora y la familia de Liko, toooooodos idiotas profundos. Había un profesor viejo que escupía su dentadura, una abeja que para que no se chivaran de que no trabajaba decidió dejar el trabajo y ser explotado por Orba, un chico que le gustaba Hanami y como la gran mayoría no se empanaba de la magia… Y mis grandes favoritos (no), la familia de Mirai, que sudaba completamente de su hija y de la gente que estuviera en su casa. Me caía bien una Madame nosequé que era el mítico tío afeminado que trabaja en la moda, pero literalmente decía “CureUp! Rapapa, vestido confecciónate” y tenía el traje hecho, así que me ponía de mala leche como el resto.

Batallas:

No voy a mentir, eh… No recuerdo mucho en este tema. Sé que no eran tan malas como en Kirakira ahora, pero desde luego fue bajón con respecto a GoPri.

Similar a la idea de las Form Change que tenían en HaCha, las chicas tienen acceso a cuatro trajes para combatir y que van más allá de ser usadas para un Finisher. Curiosamente, en teoría no podían ir cambiando de una a otra, sino que cada Style (mismo nombre que las formas de Kamen Rider Wizard, hmmmm) era en realidad una transformación independiente, con lo que en teoría Miracle y Magical tendrían cuatro transformaciones en Cure al igual que las Splash Star tenían dos. Pero como no cambian de nombre de una forma a otra, pues aún hay debate sobre el tema. O no, porque realmente a nadie le importaba un carajo lo suficientemente grande como para eso.

Las cuatro formas se basan en las piedras preciosas más conocidas, pero como la esmeralda ya estaba cogida para otra cosa, añadieron el topacio a la lista. Diamond Style era la forma base, y no me parece tuviera habilidades propias per sé, pero supongo es la forma más equilibrada. Ruby Style tenía un diseño un tanto… Navideño, pero es la de mayor poder ofensivo y si encima le añadimos que su temática era de explosiones, no hay duda era mi forma favorita. Sapphire Style se supone tenía base de agua y conocimiento, pero no vi en ningún momento que las chicas se hicieran más sabias o listas. Al menos les daba la capacidad de volar. Y finalmente, Topaz Style… No sé por qué, pero al topacio lo asocian mucho a cosas de niños, ya lo he visto en otras series y videojuegos. Aquí les daba trajes con base de caramelos que personalmente detestaba, pero tenían un concepto muy bueno en el que obtenían dos orbes cambiaformas cada una que podían usar para asistencia, tanto de plataformas para impulsarse como para crear armas, manteniéndose más o menos limitados por el tamaño que tenían los orbes. Los finisher de cada forma no estaban nada mal y además, al contrario que las Form Change de HaCha, aquí les dieron un uso considerable y amenizaban más las peleas. 

Nadie duda Ruby Style es la mejor forma ( ͡° ͜ʖ ͡°)

Pese a ello, las peleas se sintieron en la mayor parte de los episodios como una obligación. Muy pocas tuvieron amor en ellas, casi siempre estaban ahí porque “esto es PreCure y tienen que pelear”, y eran terriblemente cortas. Pocas veces las chicas atizaban de vuelta o los ataques del mismo monstruo llegaban a las mismas chicas, en general no se solía notar mucha emoción. En promedio, claro, esto es usual en PreCure (menos de un tercio de las peleas vs monstruos suelen ser buenas/épicas últimamente), pero en este caso es que ni las peleas más notorias lograban llamar tanto como podía ocurrir en otras temporadas. De hecho, sólo recuerdo dos… Del Sapphire Style, que tuvo secuencias de esquiva aérea muy chulas, pero al final eso, esquivas.

  Fue una secuencia amena, pero claro, no se disfruta mucho viendo que el monstruo es simplemente UN PUTO GATO EN MOTO.

Con la llegada de Felice la cosa no fue sino a peor. Frente a lo usual que se puede ver en otras temporadas con la llegada del “Sixth Ranger”, su overpower inicial (no penséis que esto sólo pasa en PreCure, ocurre también en Super Sentai y ocasionalmente en Kamen Rider) no desapareció a los pocos episodios y Felice se mantuvo como chetada durante toda la serie. Había momentos en los que puede no se notara mucho, pero pronto Felice empezó a encargarse de los big baddies por su cuenta mientras las otras dos lidiaban con los males menores. Y el pasotismo de Neverending Chaos era notorio, so...

Peleas de verdad sólo recuerdo cuatro: las dos de Gametts, Benigyo gigante, y la final. Ah, y las de la peli, que son geniales. Heck, si tuviera que salvar algo de Mahou Tsukai sería la película, pero en estas reseñas me quiero centrar en el anime. Quiero hacer mención a la de Labut gigante, que tan triste fue que no tuvo ni OST, y la recuerdo como la batalla final más anticlimática de todas. Animación lenta, overpower del villano sin gracia ni drama… Y breve, también. Ah, antes de que se me pase, en el episodio en que Labut la diña reciben el power-up, Over The Rainbow. Que, como habréis adivinado, es otra vez una pobre excusa para power-up. Magical y Miracle consiguen por fin sombreros de bruja de verdad, pero sus outfits apenas cambian, con sólo Felice consiguiendo un auténtico cambio importante. Pero da igual, porque el power-up sólo sirve para ejecutar el hissatsu, así que es un cambio de ropa idiota. Y dicho hissatsu era mediocre de narices para ser el ataque más poderoso de la temporada.

Para terminar, la pelea final. Bien, dicho directamente, el arco final es, en promedio, una mierda. Comienza bien, con Deusmast finalmente llegando desde el Sol a la Tierra en una secuencia muy chula (al margen de que el Sol se veía demasiado cerca de la Tierra y que, si te pones a estudiarlo desde un punto de vista físico, Deusmast era un churro de 150.000.000 km, lo cual es hilarante) y succionando a las chicas en una especie de portal… ¿Y luego qué? Pues que los dos mundos se han fusionado y están todos tan ricamente, disfrutando de sendas magia y tecnología. Literalmente, disfrutando. Sólo las chicas (y maybe el dire, no me acuerdo, pero sé que no hizo nada así que da igual) saben que algo debería ir mal, y Deusmast observa desde el espacio, esperando a que en efecto algo vaya mal. Se supone es el Apocalipsis, en serio, que cuando llegase Deusmast el mundo se acabaría. Y así te insisten durante todo el capi, que van a morir todos. Pues joé, espero así sea el Apocalipsis de verdad porque vaya delicioso paseo. Y se empeñan en meterte el drama de que “hay que parar a Deusmast, que vamos a morir”, ¡pero es que no cuela! ¡No había angustia, preocupación, mal rollo, inestabilidades mágicas, nada!

En fin, que terminan yendo finalmente contra Deusmast y ahí sí que la cosa se pone digna. Confirmando lo que estaba claro durante la serie, Magical y Miracle son meras supporters de Felice, quien ha recordado su naturaleza como Rapapa y resucitado. ¿Es esto malo? No, porque la secuencia es putamente genial. Corta, pero intensa y bien animada, y equilibra muy bien el rol de Rapapa como principal enemiga de Deusmast pero centrándose en las chicas, a las que potenciaba sus poderes. Incluso se marcan algo parecido a aquello tan horrendo de DokiDoki del hada Lance gigante contra el King Jikochuu, pero aquí no queda tan mal y es más coherente. Voy a incluirla aquí, que es cortita.

Básicamente, toda la primera mitad del episodio 49 es casi perfecta, con los dos mundos separándose tras desaparecer Deusmast y la consecuente separación de las chicas y pérdida de los ítems mágicos. Dramático, bonito y como debería ser. PERO NO HOMBRE, cómo iban a hacer eso a los niños (cuando lo hicieron para GoPri y doy gracias). La segunda mitad es sobre Mirai con 19 años, en la Facultad ya (aunque a mí me parecía el insti)… Y llorando, llorando que vuelvan todas. Y como tiene que ser y para que la niña se calle, lo hacen by power of bullshit.

Como si eso no fuera ya lo suficientemente irritante, Mahou Tsukai tiene 50 episodios. El episodio final no es el último, remataron con un extra con trama estúpida cuyo único propósito, además de rellenar, era poner un cameo de la líder de la siguiente temporada, Cure Whip (amén de un par extra de otras pelis). Un camión de sal volcado sobre un corte en el dedo por papel.

Opinión personal:

Basura. Worst season. Era difícil superar a DokiDoki, y aún a día de hoy tengo mis debates internos sobre si realmente es peor, pero creo que Toei logró romper ese récord. Sí, en DD la trama era una algarabía y era todo ManaManaManaMana, pero al menos los personajes tenían más carisma, había mejor animación en general, y era un poco (que no mucho) más serio. En Mahou Tsukai los personajes eran blandos, vacíos, sin gracia en su mayor parte; la magia como bullshit estaba presente en todas partes, no había conflicto ni drama creíble en ningún momento. Si teníamos un episodio serio, rápidamente metían alguno idiota para compensar, ejemplo de ello son los últimos 10 episodios. Peor aún, es que llegada Felice, tal era su overpower que lo poco de desafío que podía haber antes desapareció completamente o no podía tomarse nunca en serio. 

No me malinterpretéis, sin embargo, porque puedo ver más allá de mi saltyness. Mahou Tsukai tenía muy buenos conceptos, como la relación madre-hija entre las protagonistas, la inclusión de varios grupos villanos o la idea de que una de las chicas fuera mucho más poderosa pero tuviera mucho que aprender; y creo por ello (junto con lo de meter magia y tener dos mundos diferentes entre los que alternar) es una de las temporadas más originales y coloridas de la saga. Pero eso no me parece que compense en absoluto todos los fallos que le encuentro.

Perdonadme si me he dejado algo notorio, hace ya lo suyo que he visto esto, me niego a re-mirarlo y estoy hablando de lo que me obligo a recordar. Os incito especialmente a leer mis comentarios sobre los capítulos en el foro de Pretty Cure All Stars DX, bajo el nombre de Elegance. Podréis ver cuánto odio, cabreo, frustración y rage acumulé viendo esta serie.

Now, it’s Onpu time!

Casi me olvido, habréis visto cuatro ojos, ¡pero fijo que nunca visteis un cuatro cejas!

ONPUELENA

Tras la reseña estructurada y argumentada de L.A., aquí va mi aporte, como siempre, cuatro chorradas mal escritas, pero escritas con ganas. Con ganas de olvidarme de MahoPri para siempre.

A lo largo de la reseña compararé este anime con Ojamajo Doremi. Porque sí, porque puedo y porque es pertinente en muchos casos para dar ejemplo de cómo hay cosas que sí están bien desarrolladas en Doremi y mal coloreadas en MahoPri. Mucha gente ha comparado estos dos animes por el tema de las brujas y de las protagonistas cuidando de un bebé que luego se une al plantel, pero los cojones, Doremi le da cien mil vueltas a MahoPri.

Me emocioné muchísimo cuando anunciaron que la siguiente temporada de Precure estaría relacionada con la magia y la brujería. Yo fantaseaba con un mundo mágico bien construido y unas cures brujas que pegan hostias y llevan un sombrero bien grande. PERO NO. Me tenían que dar dos niñas de preescolar, que más que 13 años parece que tienen 6, cuyas motivaciones no son salvar el mundo sino aprender a usar magia para comer mandarinas. Al menos se hacen más grandecitas cuando se transforman...

La edad real de las protagonistas.

Para colmo, el inicio del opening es CLAVADITO al del anime "Moetan", que a su vez es una copia descarada de la canción insignia de Batman. Algún día haré un vídeo comparando estas tres melodías y no me lo vais a poder negar. Conclusión: el nivel de creatividad e innovación de MahoPri es más bien bajito.

QUE ESA ES OTRA, el opening. No he visto cosa más recargada y difusa (como casi todo en este anime, la verdad). En cada fotograma pasan como 800 cosas diferentes y parece que todo el mundo ha consumido éxtasis o tiene hiperactividad, una de dos.

Paraos a analizar este fotograma. ¿Por qué hay un avión? ¿Por qué hay un micrófono? ¿Por qué hay un gato? A QUÉ VIENEN TODOS ESTOS SÍMBOLOS QUE NO TIENEN NADA QUE VER CON LA SERIE.

Estoy muy de acuerdo con L.A., le pese a quien le pese, esta temporada está a la altura de Doki Doki. El argumento es un churro crudo, parece que hay guionistas que creen que cuanto más se compliquen las cosas, mejor. Y no tiene por qué ser así, ni mucho menos, testigo de ello son, por ejemplo, Smile y Go! Princess: relativamente simples en su planteamiento y desarrollo, pero para nada "simplonas", ya que la sencillez hace que la trama luzca más. O sea, MahoPri a veces peca de simplona y otras veces se pasa de colacao mental.

Y lo mismo digo de los diseños. El único diseño que me gusta es el de Felice transformada (aunque L.A. diga que es una bolsa de basura, a mí me gusta), el resto me parece que están recargadísimos: que si unos mechones por aquí, una pulsera por allá, una diadema con un mini sombrero de bruja y un flan por acullá... Luego claro, a la hora de animar semejantes trajes con un estilo tan preciosista, pues pasa lo que pasa, que se te desparraman todas las secuencias de pelea.

Hablando de transformaciones, las secuencias de transformación no están mal, eso de que se den la mano mola y están bastante bien animadas y coreografiadas. Hubiese estado bien que explicasen por qué con cada traje tenían un poder diferente, la verdad, ¿acaso había necesidad? 

Parece un fan art mal hecho, por favor.

Bueno, pasemos a hablar sobre los personajes: no me cae bien ninguno. Ah, sí, Mofurun y la abuela de Mirai son lo único salvable.

Mirai y Riko son un poco petardas. Al principio pensé que tendrían una química interesante por sus diferencias y tal, pero no, lo único que pasaba es que Riko se enfadaba y a Mirai se la sudaba olímpicamente. Haa... No sé qué decir de ella, la verdad, es mona.

Otra cosa que me chirría de Mirai es que no tiene madera de protagonista. ¿Cuáles son sus motivaciones, qué le apasiona? En varios momentos de la serie dice que no tiene ni puñetera idea de qué hacer con su vida, lo único que le importa es estar con sus amigas para siempre... Las protagonistas de otras temporadas siempre han tenido un hobby, un sueño, ALGO que les dé más personalidad que un papel en blanco, que es lo que es Mirai. Ojo, que me parece genial que quiera estar con sus amiguitas para siempre, pero es una meta en la vida poco realista... Ya se dará cuenta de que la gente cambia con el tiempo y no siempre vas a tener los mismos amigos.

Las náuseas que me da el melon pan rosa.

Mofurun lo mejor, solo hay que ver que los mejores episodios (el de cenicienta y el de las cures pequeñas) son en los que le dan más protagonismo a Moffy. En otros episodios se limitaba a decir que olía muy bien y ya, daba pena. Es que me dan ternura los peluches. 
Me encanta que en el primer capítulo Riko diga que no puede hacer hablar a un peluche (pero a un animal sí, ¿dónde está la lógica de la magia?) y al final Mofurun habla por arte de birlibirloque. En tu cara, Riko. 
-Esto lo digo de coña y a la vez no-: me gusta que Mofurun no tenga un género definido. O no tiene género (ES UN PELUCHE POR DIOS) o tiene los dos, ese es mi cañón de cabeza.

Los personajes secundarios estaban simpáticos, hacían la gracieta de turno y más o menos tenían personalidad.

Los malos no pintaban nada, ni me acuerdo de sus nombres. La mayoría ni siquiera suponía una amenaza real para las cures (sobre todo después de la aparición de Felice). Los malos principales daban risa y luego vuelven a aparecer y hasta les quieren dar personalidad, pero es demasiado tarde. O sea, el rollo medio amoroso que se traían el de las cuatro cejas y la araña... ¿Qué pretendían? ¿Y la Dominatrix? ¿Y la abeja de los cojones? ¿Y las hadas con forma de PLÁTANO o MUÑECO DE NIEVE que decían "mitomeeru" cuando las cures se ponían intensas? Ridículo y no pega ni con cola.

Así ESPALDA tendría más personalidad. (Imagen por @neodiego).

En general esta temporada se me ha hecho más infantiloide que muchas otras. Por ejemplo, el episodio de Halloween... Qué cosa más plana y sin sustancia. Tampoco se tratan temas adultos en la serie y los personajes adultos en muchos casos tienen poca personalidad de adultos (como lo que comentaba L.A. de los padres de Mirai despreocupados totalmente de quién entraba o no en casa). Me choca esto porque en otras temporadas, como Fresh, la familia estaba reflejada de una manera más realista y eficaz. Ni que decir tiene que en Doremi el tema de la familia está tratado mejor que en casi todos los animes, ahí lo dejo. 

El mundo mágico de MahoPri también está falto de creatividad por todas partes, no innova con conceptos nuevos (lo único la concha-saco de dormir, supongo), solo coge cosas que ya existen y las junta. Con esto me refiero a que haya dragones, sirenas y pegasos en las diferentes partes del mundo, me parece que el uso de estas criaturas para crear mundos fantásticos está muy manido. Precure ha tenido mundos más interesantes como cualquier mundo de las hadas de cualquier temporada o los mundos de las películas, de cualquier temporada también. Tienen más personalidad que el mundo mágico este que parece un popurrí de cosas más que un mundo consistente. Además, es un mundo sin reglas (o eso parece, porque lo de no poder hacer hablar a un peluche...), todo el mundo hace lo que le sale de la piluta y todos tan contentos. Y si en algún momento tuvo reglas era porque le convenía al guion. EL MUNDO DE LAS BRUJAS DE DOREMI ESTÁ MUCHO MEJOR CONSTRUIDO.

Paso de explicar lo que sucede aquí.

El tema de la magia también es muy confuso; otra vez, no sabemos qué reglas hay ni cómo funcionan. En los primeros capítulos vemos cómo las chicas tienen que hacer las clases de recuperación y van mejorando sus hechizos. ¿Solo con pasar los exámenes ya vale para que mejoren? Porque mejoran muy rápido, cada capítulo hacían algo nuevo y ya ni hablamos de Mirai, una humana, usando magia mejor que Riko... En Doremi el tema de los exámenes de brujería estaba MUCHO mejor llevado y el progreso era más evidente y menos apresurado. Y sí, en Doremi las reglas de la magia son más claras y están mucho mejor explicadas. En resumen, que en Doremi tenía más sentido. 

Por supuesto, MahoPri no explora las implicaciones y consecuencias del uso de la magia. Doremi sí. En Doremi se profundiza en por qué arreglar algo con magia si lo puedes hacer con tus manos o cómo la magia se puede usar para fines malvados, realmente malvados (el uso de la magia en la guerra, muy posiblemente una de las guerras mundiales). En Doremi hay varias brujas que reniegan del uso de la magia por estas razones. En Doremi se reflexiona sobre la inmortalidad. En MahoPri... La magia oscura, que es mala porque es oscura y sirve para crear ENGENDROS de mostruos (los Yokubaaru son lo peor que he visto en años).

Los nombres de todo en el mundo mágico me parecen ridículos. El hechizo me parece una memez y vamos a ver a quién se le ocurrió el nombre de MOTHER RAPAPA y pensó que era una buena idea para un personaje importante. Batty es un nombre súper original y XY... XY... Me he quedado sin adjetivos. Bueno y lo de MUHOU como contraparte de MAHOU... Sin palabras.

El impacto está ausente en MahoPri. Las peleas, faltas de impacto (más que nada por la animación penosa y el poco amor depositado en la coreografía de las luchas, con pocas excepciones). ¿Los momentos emotivos? Quitando los dos últimos capítulos, CERO impacto. Cuando Haa desapareció era incapaz de tomármelo en serio. Creo que una mejor banda sonora en estos momentos claves hubiese ayudado a elevar las escenas relevantes. Como dije antes, nada parecía una amenaza para las cures. Total, todo les salía bien siempre. Encontraban las piedras sin mover un dedo, todos los adultos están de su parte y nadie les pone pegas a lo que hacen, a Mirai le cae la varita mágica del árbol porque, otra vez, le conviene al guion... Menos mal que cuando se separan al final sufren un poquito.

Qué miedo, ¿no?

En definitiva, MahoPri es una temporada de Precure muy diferente a las demás y muy atrevida, hace muchas cosas nuevas nunca antes vistas: el gran desarrollo del mundo mágico, que las cures viajen entre mundos a menudo y pasen largas temporadas en ellos, el desarrollo de las vidas escolares de las protagonistas en ambos mundos, UN PELUCHE QUE HABLA, una abeja que habla, el genio de la lámpara, hacer que los personajes de ambos mundos interactúen, que las cures crezcan al transformarse, que las diferentes formas les den diferentes poderes, un episodio en el que las cures están creciditas...

No obstante, con tanta novedad parece que los guionistas perdieron un poco el norte y no sacaron provecho, creo yo. A mí no me ha gustado, en gran parte porque el mundo mágico me parece un aburrimiento, los personajes unos sosainas, el argumento nada revolucionario y todo parco en seriedad.

Conclusión: el nivel de creatividad de MahoPri es más bien bajito.